Seguramente conoces a alguien que no come de forma saludable. De hecho, la mayoría de las personas no pueden mantener una dieta saludable de forma constante. Se conforman con la excusa de que hoy en día vivimos con tanta prisa que es imposible tomarse el tiempo de preparar una comida en casa. Pero seamos realistas, esos dulces listos para comer que se encuentran en los estantes de los supermercados son mucho más atractivos. Además de ahorrar tiempo, el sabor se mejora artificialmente con numerosos químicos añadidos a estos alimentos para aumentar su vida útil y hacer que te vuelvas adicto a ellos.

Es difícil resistirse. Sin embargo, es necesario pensar en el daño acumulado en nuestro organismo durante años de consumir tanta “comida chatarra”. Por mucho que el paquete diga que el alimento es “rico en vitaminas”, desconfíe. Hay una frase que dice: “pela más, desempaqueta menos”. La mayoría de los productos industrializados que prometen “salud”, “vitaminas” y otras cosas buenas para la salud no ponen en letras grandes el alto contenido de sodio, grasas trans, azúcares y calorías.

En un país donde cerca de una décima parte de la población padece diabetes y las enfermedades cardíacas son la principal causa de muerte, nuestro sistema alimentario es una vergüenza nacional y un desastre de salud pública. Pero elegir comer bien no es una opción fácilmente disponible para muchos estadounidenses, en gran parte debido a las estructuras implementadas por las grandes empresas alimentarias.

En tu próxima visita al supermercado, no te dejes seducir por los alimentos deliciosos, pero poco saludables, que siempre están en las estanterías y en los lugares que más llaman tu atención. Los tenderos no piensan en tu salud, sino en las ventajas y beneficios que estos productos ofrecen. Hemos elaborado una lista con los alimentos más nocivos para que te mantengas alejado de ellos y no los incluyas en tu cesta en tu próxima visita al supermercado.

Todo el mundo sabe que los refrescos están llenos de azúcar, así que crees que la solución es consumir refrescos light. Pero no. Los refrescos light están llenos de aspartamo, un tipo de azúcar artificial que es igualmente perjudicial para la salud.

Es posible que estos alimentos hayan sido elaborados con ingredientes naturales. Sin embargo, para obtener el resultado final que aparece en el paquete, se les ha añadido una gran cantidad de sodio.

En el empaque se indica que son fuente de proteínas, resulta que el porcentaje de proteínas es muy bajo en comparación con la cantidad de azúcar, quién diría, el componente principal de este dulce.

Los Goldbears de Haribo, por ejemplo, contienen 6,9 gramos de proteína y 46 gramos de azúcar por cada 100 gramos de gomitas que consumes.

Son muy comunes en el desayuno: Fruity Pebbles, Lucky Charms, Cap'n Crunch y Cocoa Puffs.

Una taza de cereales contiene en promedio 18 gramos de azúcar. Y el azúcar en el desayuno aumenta los niveles de azúcar en sangre y de insulina, un escenario de riesgo para desarrollar diabetes.

Las deliciosas papas fritas están llenas de sal y grasa, ingredientes malos para la salud. Por ejemplo, las papas fritas Lay's sabor crema agria y cebolla contienen 160 calorías, 10 gramos de grasa y 160 miligramos de sodio por cada 28 gramos de papas fritas.

Muchos se quejan de que la mantequilla contiene una gran cantidad de grasa, pero créanme, la margarina es mucho peor para la salud.

La margarina se obtiene a partir de aceites vegetales que pasan por un proceso de hidrogenación para alcanzar el estado sólido. Este proceso, sin embargo, produce grasas del tipo trans.

Mientras que la mantequilla se elabora a partir de grasa animal, la margarina proviene de aceites vegetales, que pueden solidificarse mediante hidrogenación, lo que a su vez produce grasas trans. Algunas marcas de margarina también pueden contener emulsionantes, colorantes y otros aditivos.

Los fideos instantáneos de Nissin contienen 1160 miligramos de sodio y 11 gramos de grasa (con 5 gramos de grasa saturada) en cada envase. Eso es más de la mitad de la ingesta diaria recomendada de sal, según la Asociación Estadounidense del Corazón. ¿Puede compensar este exceso de grasa con otras comidas? Piénselo. Es mejor equilibrar la cantidad adecuada de grasa para cada período del día.

Basta con echar un vistazo a la etiqueta de ingredientes: los primeros componentes que aparecen en la lista son el azúcar y el aceite de palma, incluso antes que las avellanas. La Nutella tiene 58% de azúcar y 32% de grasa. ¿Por qué no preparas tu propia crema de chocolate con avellanas en casa? Puedes encontrar recetas más saludables en Internet, incluidas algunas opciones veganas y sin aceite.

Según la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, la mayor parte de la soja cultivada en ese país es transgénica: en 2018, el 94% de toda la soja plantada en el país estaba modificada genéticamente.

Por definición, algo que es transgénico no puede ser orgánico, y se ha demostrado que la soja convencional o no orgánica es perjudicial para nuestros sistemas endocrino y hormonal, afirma el Departamento de Agricultura de Estados Unidos.